Libertad Digital

Según versiones preliminares, el Ayuntamiento de Madrid ha aprobado una nueva normativa que prohíbe la operación de pisos turísticos en edificios que comparten uso con viviendas residenciales en el distrito Centro. Esta medida busca reducir el impacto negativo del alquiler vacacional en la convivencia vecinal, frenar el encarecimiento del acceso a la vivienda y preservar la identidad de los barrios históricos.

Contexto y objetivos de la medida

La decisión responde a la creciente preocupación por la masificación turística y la gentrificación que ha transformado el centro de Madrid. La nueva regulación impide la creación de nuevos pisos turísticos en fincas mixtas y exige licencias específicas para los pisos ubicados en edificios de uso exclusivo turístico. Las excepciones se aplican únicamente a aquellos alojamientos con licencias vigentes previas a la normativa.

Consecuencias y desafíos

Una consecuencia directa de esta prohibición será la reconfiguración del mercado de alquiler en el centro, con una probable aumento en la oferta de viviendas para alquiler de larga duración y una posible estabilización o descenso en los precios de la zona. Por otro lado, esta medida genera tensión con el sector turístico y las plataformas digitales, que podrían ver afectadas su rentabilidad y modelo de negocio.

El Ayuntamiento planea intensificar las inspecciones para asegurar el cumplimiento de la normativa, lo que conllevará la clausura de pisos ilegales y puede derivar en litigios y procesos administrativos.

Publicado por: Editor Minuto30

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