Las autoridades investigan a un grupo familiar por la presunta conversión irregular de más de 400 hectáreas de terreno de secano en suelo de regadÃo. Según los reportes iniciales, esta transformación se habrÃa realizado sin los permisos correspondientes, lo que ha derivado en la apertura de un proceso formal para determinar responsabilidades.
De acuerdo con las primeras estimaciones, los daños al ecosistema provocados por esta modificación ilegal podrÃan superar los seis millones de euros. El caso ha llamado la atención por el posible alcance de las afectaciones ambientales asociadas a un cambio de uso del suelo sin control técnico o institucional.
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Actualmente, se adelantan diligencias para establecer el impacto total de esta actuación, asà como para definir las posibles consecuencias jurÃdicas para los responsables.