
Iberdrola ha acordado la venta de su unidad británica de contadores inteligentes, SP Smart Meter Assets Limited (SPSMAL), al grupo australiano Macquarie por un valor estimado de 1.060 millones de euros. La operación incluye la transferencia de 2,7 millones de dispositivos actualmente operativos en el Reino Unido y forma parte de la estrategia global de la energética española de rotación de activos, con la que ya ha superado los 10.000 millones de euros en desinversiones. El acuerdo está pendiente de aprobación por parte de las autoridades regulatorias del Reino Unido y se espera que se materialice durante el tercer trimestre de 2025.
Este movimiento responde al objetivo de Iberdrola de redirigir sus inversiones hacia áreas prioritarias como las energías renovables y la expansión de infraestructuras eléctricas, reforzando así su posicionamiento en los sectores clave de la transición energética. Según fuentes de la compañía, la salida del negocio de alquiler de contadores en Reino Unido permite una mayor concentración en sus mercados estratégicos y proyectos con mayor retorno, al tiempo que consolida su fortaleza financiera.
Como consecuencia directa, Iberdrola dejará de operar en el segmento de contadores inteligentes en el Reino Unido, cerrando un capítulo relevante en su presencia en ese país. Para Macquarie, la adquisición representa una ampliación sustancial de su flota de dispositivos, que ya supera los 10 millones de unidades, y refuerza su papel como actor dominante en el mercado británico de medición energética. Esta transacción se posiciona como la segunda mayor venta de activos en la historia de Iberdrola, después de la desinversión en México, marcando otro hito en su proceso de reconfiguración estratégica.