
Tener una huerta urbana en casa, aunque sea en un balcón o una ventana, no solo aporta alimentos frescos y saludables, sino que también conecta con la naturaleza y ayuda a reducir la huella ecológica personal. Además, es una actividad terapéutica y educativa.
Plantas ideales para espacios pequeños
Es posible cultivar verduras como lechuga, tomate cherry, hierbas aromáticas (albahaca, perejil), y hasta pequeñas raíces en macetas o jardineras. La clave está en elegir plantas que no requieran mucho espacio y que se adapten bien al clima y la luz disponible.
Consejos básicos para empezar
Usa tierra fértil y bien drenada, riega con moderación y asegúrate de que las plantas reciban luz natural. Además, el compostaje casero puede ser un gran aliado para nutrir la huerta y promover un ciclo ecológico saludable en espacios urbanos.