Cataluña, un referente en donación y trasplante, pero con un reto pendiente: las negativas familiares

La comunidad autónoma alcanzó nuevos récords en 2023, con 1.393 trasplantes y 384 donantes cadáver reales, pero también se registró un incremento de las negativas familiares, que ascendieron a 123.

Los trasplantes de riñón, hígado y corazón fueron los más frecuentes, con un aumento del 2,9%, 11,3% y 3,7%, respectivamente. Los trasplantes de pulmón y páncreas disminuyeron un 4,7% y 0%, respectivamente.

El Hospital Vall d’Hebron fue el centro que realizó más trasplantes en Cataluña, con 349. Le siguieron el Clínic, con 347, y el Hospital de Bellvitge, con 291.

En cuanto a los trasplantes pediátricos, también se registraron cifras récord, con 82 trasplantes hepáticos y 34 cardíacos.

El número de donantes cadáver reales también aumentó un 7,6%, hasta los 384. Sin embargo, también se registró un incremento de las negativas familiares a la donación, que ascendieron a 123.

¿Por qué se producen las negativas familiares?

La evolución del perfil del donante cadáver, que ha dejado de ser mayoritariamente de muerte encefálica para ceder el protagonismo a la muerte en asistolia, podría explicar el incremento de las negativas familiares.

En la muerte encefálica, la persona ya ha fallecido y no hay vuelta atrás. Sin embargo, en la muerte en asistolia, el corazón y la respiración se paran, pero el cerebro aún puede funcionar durante unos minutos. En este contexto, es más difícil para las familias tomar una decisión sobre la donación de órganos.

¿Qué se puede hacer para reducir las negativas familiares?

La Organización Catalana de Trasplantes (OCATT) está trabajando en varias líneas para reducir las negativas familiares, entre ellas:

• Sensibilizar a la población sobre la importancia de la donación de órganos.
• Mejorar la comunicación con las familias de los donantes potenciales.
• Ofrecer más apoyo a las familias en el proceso de toma de decisión.

Cataluña sigue siendo un referente en donación y trasplante, pero el incremento de las negativas familiares es un reto pendiente que requiere de la colaboración de todos.