radar
Foto tomada de video

Un radar trípode camuflado detrás de un muro en una recta con límite de velocidad de 50 km/h en Trapagaran, Vizcaya, ha generado indignación entre los conductores.

La ubicación del radar, que se encuentra en una zona poco visible y con escasa señalización, ha sido calificada como una “trampa” por parte de los usuarios de la vía.

Presuntamente, el objetivo de la colocación del radar es reducir la siniestralidad en la zona. Sin embargo, la forma en que ha sido instalado ha levantado sospechas de que su objetivo principal es recaudar fondos mediante multas.

VIDEO: Descubren radar escondido detrás de un muro

Las consecuencias de la colocación del radar podrían ser:

  • Un aumento de la siniestralidad en la zona. Al estar escondido el radar, los conductores podrían verse sorprendidos y frenar bruscamente, lo que podría ocasionar accidentes.
  • Un aumento de la tensión entre la población y las autoridades. La sensación de que el radar ha sido colocado como una “trampa” podría generar resentimiento hacia las autoridades y dificultar la labor de control del tráfico.
  • Una pérdida de confianza en las autoridades. Si se confirma que el objetivo principal del radar es recaudar fondos, la confianza de la población en las autoridades podría verse afectada.

Es crucial que las autoridades aclaren sus intenciones y aseguren que la colocación de radares se haga pensando en la seguridad de todos y no como una estrategia meramente recaudatoria.

El diálogo con los ciudadanos podría ayudar a entender mejor las medidas de tráfico y reforzar la confianza en las acciones de regulación vial.

Publicado por: Editor Minuto30

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