La Reina del Pop ha respondido a las demandas colectivas presentadas en su contra por sus retrasos en la salida al escenario durante su gira “The Celebration Tour”.
Madonna argumenta que sus fans “entienden cómo funcionan sus conciertos” y que la hora indicada en las entradas no es una promesa de la hora exacta en que subirá al escenario. La cantante califica las demandas como un “acoso público” y una “campaña de extorsión” por parte de los abogados de los demandantes.
En su respuesta legal, Madonna afirma que sus seguidores son conscientes de su tendencia a llegar tarde a los conciertos y que incluso disfrutan de la expectación y la sorpresa que esto genera.
La artista también señala que las demandas le han causado un daño financiero y emocional significativo. Las demandas alegan que los retrasos de Madonna en sus conciertos son una falta de respeto hacia sus fans y que constituyen una publicidad engañosa.
Los demandantes exigen una compensación económica y que Madonna se comprometa a comenzar sus conciertos a la hora anunciada. Este caso ha generado un gran debate en torno a los derechos de los fans y las obligaciones de los artistas.
Algunos seguidores de Madonna han expresado su apoyo a la artista, argumentando que sus tardanzas son parte de su espectáculo y que no deberían ser motivo de demanda. Otros, por el contrario, consideran que los retrasos son una falta de respeto y que los fans tienen derecho a ver a la artista a la hora indicada en las entradas.
Aún se desconoce cómo se resolverá este caso, pero sin duda ha puesto de relieve la compleja relación entre artistas y fans.