
Un joven de 23 años fue detenido por los Mossos d’Esquadra tras protagonizar una persecución por la AP-7 e intentar engañar a los agentes intercambiándose con el copiloto. Según versiones preliminares, el individuo conducía a gran velocidad y desoyó las indicaciones de una patrulla que intentaba detenerlo, dándose a la fuga. Tras ser interceptado, intentó eludir su responsabilidad, pero fue arrestado por los agentes.
Como consecuencia directa, el detenido enfrenta cargos por conducción temeraria y circular sin permiso de conducir. Su intento de huir y engañar a la policía agrava su situación legal, exponiéndolo a sanciones severas. Aparentemente, su conducción a alta velocidad en la AP-7 puso en riesgo la seguridad de otros conductores.
Este incidente subraya la importancia de la vigilancia policial para la seguridad vial en Cataluña. La detención de este conductor busca disuadir conductas peligrosas y se espera que el proceso judicial siente un precedente sobre las consecuencias de la conducción irresponsable y la desobediencia a la autoridad.