El Corte Inglés cerrará el centro comercial de Méndez Álvaro, situado en el distrito madrileño de Arganzuela, el próximo 29 de febrero. La decisión, que afecta a unos 600 trabajadores, se debe a una sentencia judicial que ordenó la demolición parcial de tres centros comerciales por exceso de edificabilidad.
El inmueble de Méndez Álvaro, que dispone de una superficie de 11.811 metros cuadrados, fue inaugurado en 1991. En él se encontraban tiendas de moda, restauración, ocio y servicios, así como un hipermercado de El Corte Inglés.
La sentencia del Tribunal Supremo de 2019 fue consecuencia de una denuncia presentada por la asociación ecologista Ecologistas en Acción contra la modificación del plan urbanístico de Madrid de 2008. El tribunal consideró que dicha modificación había permitido la construcción de más metros cuadrados de los permitidos en la zona.
En un principio, el Ayuntamiento de Madrid anunció que iba a recurrir la sentencia del Supremo. Sin embargo, a principios de 2023, la comisión de Urbanismo del consistorio aprobó la modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para la creación del Área de Planeamiento Nuevo Sur Méndez Álvaro.
Esta modificación, que fue aprobada con los votos a favor del PP y Vox y la abstención del PSOE, permite que en lugar de un centro comercial se construyan dos torres de oficinas de 27 plantas.
Recolocación de los trabajadores
El Corte Inglés ha asegurado que se recolocará a toda la plantilla del centro comercial de Méndez Álvaro en otros centros del grupo. La compañía ha iniciado ya las negociaciones con los sindicatos para concretar las condiciones de esta recolocación.
Los trabajadores del centro comercial de Méndez Álvaro han mostrado su rechazo a la decisión de El Corte Inglés. Han convocado una concentración para el próximo 28 de febrero, el día anterior al cierre del centro.
Impacto económico
El cierre del centro comercial de Méndez Álvaro tendrá un impacto económico significativo en la zona. El inmueble generaba unos 600 puestos de trabajo directos y otros 2.000 indirectos.
El centro comercial también era un importante motor económico para el distrito de Arganzuela. En él se concentraban un gran número de tiendas y restaurantes, que atraían a un gran número de visitantes.
Perspectivas de futuro
El cierre del centro comercial de Méndez Álvaro abre el camino a la construcción de dos torres de oficinas de 27 plantas. Estas torres podrían albergar a empresas de todo tipo, lo que podría generar nuevos puestos de trabajo en la zona.
Sin embargo, el impacto de estas torres en el entorno también es una cuestión que preocupa a los vecinos de la zona. Algunos temen que las torres puedan provocar un aumento de la contaminación y el ruido.