En una operación llevada a cabo en el municipio de Castuera, en la provincia de Badajoz, las autoridades desmantelaron un cultivo de aproximadamente 500 plantas de marihuana al interior de una vivienda. Según versiones preliminares, el inmueble estaba acondicionado con invernaderos interiores dotados de sistemas especializados para el desarrollo de las plantas.
Durante el operativo fueron detenidas tres personas: el propietario de la vivienda y dos individuos encargados presuntamente del mantenimiento de la plantación. Uno de los arrestados era requerido por la Autoridad Judicial para su detención y posterior puesta a disposición. En el lugar también se identificaron conexiones ilegales a la red eléctrica, utilizadas para alimentar el sistema de cultivo.
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Como resultado de este hallazgo, las investigaciones continúan con el fin de determinar el alcance de la actividad y si existen otras personas vinculadas. El caso refuerza la necesidad de monitorear el uso de inmuebles particulares para fines ilícitos, así como de fortalecer los controles sobre el suministro energético en la región.