En un operativo internacional coordinado con la colaboración de Europol y Eurojust, las autoridades han desarticulado lo que aparentemente era una red criminal dedicada al tráfico de migrantes de nacionalidad cubana.
Este grupo, según las investigaciones preliminares, habría facilitado el traslado de personas desde Cuba hasta Europa en una compleja ruta que incluía paradas estratégicas en Serbia y Grecia.
Se presume que los migrantes llegaban primero a Serbia, desde donde eran llevados a Grecia para abordar vuelos que los conducirían hasta España, destino final de este esquema de tráfico.
El operativo ha resultado en la detención de 36 personas vinculadas a esta organización, quienes supuestamente desempeñaban funciones clave en el traslado y logística del movimiento migratorio ilícito.
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Aunque los detalles del caso están aún bajo investigación, las autoridades destacan la importancia de la cooperación internacional para combatir estas redes trasnacionales, que ponen en riesgo la seguridad y la vida de las personas involucradas.
Este caso podría ser un ejemplo más de cómo estas organizaciones se aprovechan de las vulnerabilidades de los migrantes en busca de mejores oportunidades.